Las valencianas trabajan gratis desde el 5 de septiembre

En el marco de la celebración del Día por la Igualdad Salarial de Hombres y Mujeres, el Gabinete Técnico de CCOO PV realiza un balance anual sobre la incidencia de la brecha salarial de género a partir de datos de la Encuesta Anual de Estructura Salarial.

Según el último dato que ofrece la Encuesta Anual de Estructura Salarial (INE) en el País Valenciano el salario medio anual de las mujeres debería incrementarse un 32% para equipararse al de sus compañeros. La diferencia entre ambos es de 5.733 euros, lo que equivale a que ellas perciben 409 euros mensuales menos.

El informe vuelve a poner de relieve el aumento de la distancia en las retribuciones entre ambos sexos, que resulta aún más llamativo expresado en términos temporales. Las valencianas tienen que trabajar 116 días más para alcanzar el mismo salario que sus compañeros, es decir que desde el 5 de septiembre, las mujeres del País Valencià dejan de percibir ingresos salariales por trabajar.

La secretaria de la Dona de CCOO PV, Cándida Barroso, considera la diferencia retributiva “un agravio comparativo injustificable, que sigue ampliándose, a pesar de las reiteradas declaraciones de intención por parte de los diversos agentes implicados”.

Ante esta demoledora situación que padecen las mujeres valencianas, CCOOPV reclama poner en marcha de forma urgente lo acordado en el Pleno de las Cortes Valencianas el pasado día 17 de febrero: garantizar el cumplimiento de la ley 9/2003 para la Igualdad entre hombres y mujeres y la creación de una Mesa por la igualdad retributiva.

El sindicato juzga impostergable el comienzo del Diálogo Social introduciendo la perspectiva de género, incorporar cláusulas de acción positiva en la negociación colectiva y trabajar para el necesario cambio de paradigma social y cultural que propicie una sociedad exenta de sexismo y desigualdades.

La brecha salarial persiste en nuestro territorio en porcentaje similares a la media estatal que se sitúa en el 31,6%. En la islas Canarias y Baleares la diferencia retributiva es menor, aún así relevante (un 17,4% y un 18,9% respectivamente) y un dato especialmente alarmante es el porcentaje alcanzado en el norte del país, donde llega a registrarse hasta un 43,8% de brecha.

La crisis ha tenido una especial incidencia en la acentuación de la brecha salarial de género en nuestro territorio, pues si en sus inicios (2008) ya se destacaba que la disparidad en los salarios entre mujeres y hombres se situaba entorno al 30%, ocho años después ha aumentado dos puntos porcentuales, superando actualmente 32%.

Esta tendencia se explica fundamentalmente por el mayor volumen de trabajo a tiempo parcial de las trabajadoras. En muchas ocasiones esta modalidad de jornada no es una opción personal, sino que tiene carácter involuntario, está condicionado por la rama de actividad y malas prácticas empresariales.

La modalidad de contratación repercute en la ganancia media anual entre ambos sexos, mientras en el precariado la diferencia salarial entre mujeres y hombres es mínima (en torno al 5%) la brecha se ahonda según se consolidan las carreras laborales. Las  mujeres con contrato indefinido llegan a percibir un 36,4% menos de salario que los hombres en la misma situación.

El dato más llamativo se registra en el sector industrial, donde se observa una importante disparidad salarial. Las trabajadoras del sector deberían incrementar un 38,4% su salario (unos 6.892 euros/anuales) para percibir lo mismo que sus compañeros.

La diferencia salarial se produce en todos los intervalos de edad  y aumenta progresivamente, siendo la más escandalosa el tramo entre 45 y 54 que alcanza una brecha del 36,2% que representaría 7.149,62 euros anuales menos que sus compañeros.